La Cascada de Auga Caída, también conocida como Fervenza de Augacaída, es una de las maravillas naturales más impresionantes de la Ribeira Sacra. Esta cascada, con una caída de aproximadamente 40 metros, es un destino popular para los amantes de la naturaleza y los senderistas. A continuación, exploraremos en detalle cómo llegar, qué esperar y qué más se puede hacer en los alrededores.
Llegar a la Cascada de Auga Caída es una aventura en sí misma. Desde el pueblo de Pantón, se debe tomar la carretera N-120 en dirección a Os Peares y seguir las señales hacia Marce. El camino está bien señalizado y, a lo largo del trayecto, se pueden ver restos de bodegas, molinos y antiguos muros de piedra que añaden un toque histórico al recorrido.
La ruta de senderismo que lleva a la cascada tiene una longitud de aproximadamente 2.4 kilómetros ida y vuelta, con un desnivel de 220 metros. Los primeros mil metros del recorrido son relativamente planos y fáciles de caminar, rodeados de un bosque autóctono lleno de carballos, pinos y helechos. Sin embargo, los últimos 400 metros presentan un desafío mayor debido a la fuerte pendiente y las numerosas escaleras que llevan al fondo del valle donde se encuentra la cascada .
La caminata hasta la cascada es un verdadero placer para los sentidos. A medida que uno desciende por el sendero, la vista del bosque denso y el sonido del agua corriendo se hacen más presentes. La ruta ofrece varios puntos de interés, como miradores y bancos de madera donde los visitantes pueden descansar y disfrutar de la vista panorámica. En el último tramo, una pasarela de madera y un camino más accidentado conducen hasta el pie de la cascada. Este tramo es particularmente difícil y solo se recomienda para aquellos con buena condición física y experiencia en senderismo.
Para los menos aventureros, existe la opción de llegar a la cascada por el río Miño. Varias empresas locales ofrecen excursiones en barco que llevan a los visitantes cerca de la base de la cascada, evitando así la caminata por el sendero empinado. Esta opción es ideal para familias con niños pequeños o personas con movilidad reducida.
La Cascada de Auga Caída es espectacular en cualquier época del año, pero es especialmente impresionante durante la primavera y el otoño cuando el caudal del agua es mayor. La cascada es alimentada por el arroyo Aguianza, que fluye con fuerza entre las rocas y crea un espectáculo natural que deja sin aliento a quienes lo visitan.
Para quienes prefieren una experiencia más relajada y segura, el mirador principal ofrece una vista espectacular de la cascada desde una distancia prudente. Situado estratégicamente, este mirador permite a los visitantes observar la magnitud de la cascada y la majestuosidad de su caída sin necesidad de emprender el desafiante descenso. Desde aquí, se pueden captar fotos impresionantes y disfrutar del sonido constante del agua que cae, que actúa como una suerte de terapia natural para los oídos y la mente. Para los más aventureros, el descenso hasta la base de la cascada ofrece una experiencia aún más cercana y envolvente, donde el rugido del agua y la bruma refrescante crean una atmósfera mágica.
La Ribeira Sacra es conocida por sus paisajes espectaculares y su patrimonio cultural. Además de la Cascada de Auga Caída, la región ofrece numerosas actividades y lugares de interés.
La Cascada de Auga Caída es un destino imperdible para cualquiera que visite la Ribeira Sacra. Su impresionante caída de agua, la belleza del sendero que conduce a ella y la riqueza natural e histórica de la región la convierten en un lugar perfecto para una escapada. Tanto si eres un aventurero ávido como si buscas un lugar tranquilo para disfrutar de la naturaleza, la Cascada de Auga Caída te ofrecerá una experiencia inolvidable.
